¿Un cambio de lealtades en el horizonte?

En los círculos políticos de Entre Ríos se rumorea que Bisogni, dirigente del Partido Justicialista (PJ), podría estar negociando su incorporación al gobierno de Rogelio Frigerio. Esta posibilidad ha generado desconcierto entre sus pocos compañeros de militancia (aunque no sorpresa), dado que Bisogni ha sido un referente del PJ en Concepción del Uruguay y la provincia, ocupando cargos como intendente en dos ocasiones, diputado provincial, habiendo renunciado a la banca alcanzada en 2019 como diputado provincial (lugar al que accedió por pedido de Lauritto) para asumir la presidencia del IAPV durante la gestión de Bordet. Actualmente es una figura que está de vuelta, con su imagen deteriorada.

Lo cierto es que recientemente se habría llevado a cabo una reunión en una ciudad entrerriana ubicada en el centro-este de la provincia de la que habrían participado Bisogni, Berthet, un alfil político del gobernador Frigerio y demás dirigentes. En este encuentro se habría concretado el acuerdo para el traspaso de Bisogni al espacio de Frigerio. Uno de sus objeticos: asegurar su continuidad en la escena política hasta alcanzar los años necesarios para su jubilación. Se especula que Bisogni podría asumir un cargo en la Comisión Administradora para el Fondo Especial de Salto Grande (CAFESG).

Es oportuno mencionar que el apellido Bisogni apareció en diarios como La Nación vinculado aunque de forma indirecta en la causa de los seguros durante el gobierno de Alberto Fernández. Este caso investigó posibles irregularidades en la contratación de pólizas de seguros por parte de organismos estatales, involucrando a altos funcionarios y empresarios del sector.

En las elecciones internas pasadas, Bisogni obtuvo unos escasos 3.000 votos, resultado que evidenció una importante disminución en su caudal político dentro del PJ concepcionero. Este limitado desempeño electoral sería todo su activo en las negociaciones. La idea sería transferir ese puñado de votos a una eventual candidatura de una figura (de mínima, cuestionada) que también pasó del PJ uruguayense al frigerismo hace poco más de un año. Como si la política fuera lineal y que los votos pudieran «transferirse». Más aún, una figura como Bisogni difícilmente pueda siquiera transferir algún voto.

La posible incorporación de Bisogni al gobierno de Frigerio vuelve a plantear una vez más interrogantes sobre sus convicciones y lealtades. Se sabe que en política las decisiones personales tienen repercusiones colectivas, y las lealtades cuando se quiebran, dejan cicatrices difíciles de sanar. El tiempo dirá si se da esta incorporación al gobierno de Frigerio. La pregunta es: un retirado a cuarteles de invierno como Bisogni ¿suma o resta?. Se verá. ¿Se verá?

Fuentes: Letra P y Miércoles Digital – De la redacción.